Archive for febrero, 2010
Protegido: Día 100 a 102 (22 al 24/02/10): De nuevo en Santiago
Jueves, febrero 25th, 2010Día 98 y 99 (20 y 21/02/10): Cayo Piedras y Cayo Blanco
Lunes, febrero 22nd, 2010Cien días ya, ¡qué barbaridad! Como pasa el tiempo, aunque en el fondo, si lo pienso, me parece tan lejana Valencia y mi vida anterior, llega un momento en el que pierdes la noción del tiempo, no sabes en que día de la semana estas, tienes que mirar el reloj para saber la fecha, uno se habitúa a todo, a veces me parece que llevo navegando toda la vida, que solo he hecho que esto, y que mis recuerdos anteriores son implantes, como en la película Blade Runner, mi película favorita. Por cierto, una de las cosas que me ha permitido este viaje ha sido leer el libro en el que se inspiró la película: “¿sueñan los androides con ovejas mecánicas?”, una obra maestra de Philip K. Dick, eso sí, la lectura ha sido en formato electrónico, con mi e-book, un invento excelente para un viaje de este tipo, 15.000 libros a tu disposición en un dispositivo del tamaño de una cuartilla, no lo perdáis de vista como regalo estrella para las próximas Navidades.
Como os conté, la noche del viernes al sábado la pasamos fondeados frente a Marina Gaviota, ninguna respuesta ni visita de las autoridades durante la noche, todo tranquilo hasta la mañana siguiente. Según estaba previsto amaneció con un sol de justicia, aunque con viento frio, pero para nosotros era un lujo, tras más de dos semanas con un frente frio tras otro, sin apenas sol y con temperaturas bajas.
Protegido: Día 95 a 97 (17 a 19 /02/10): Pruebas superadas
Lunes, febrero 22nd, 2010Día 94 (16/02/10): Fuego a bordo
Viernes, febrero 19th, 2010Hemos tenido un buen susto, pero afortunadamente sin consecuencias graves para ninguno de nosotros ni para el barco, os cuento como han sucedido las cosas estos días, es un texto largo, pero intenso a la vez.
Navegamos de Marina Hemingway a Varadero la noche del lunes al martes, en un principio íbamos a motor ajustando la velocidad para llegar de día, de repente se empezó a levantar el viento y a abrirse, de modo que nos permitía navegar a vela. Al inicio de mi guardia decidí apagar motor, los 5 nudos que necesitábamos los hacíamos perfectamente solo con el génova y la brisa suave que teníamos a un descuartelar. Progresivamente el viento fue subiendo y yéndose hacia el largo, se estableció en una intensidad de 20 nudos, así que no tuve más remedio que ir enrollando génova para ajustar la velocidad, acabé dejando 3 ó 4 metros de vela, y con eso andábamos lo suficiente. ¡Qué ironía! Cuando quieres ir rápido no hay viento o te viene de proa y cuando se trata de lo contrario aparece un viento excelente, navegar es así… Para amenizar la noche, además de tener que ir frenando el barco, de repente se puso a llover con una intensidad propia de estas latitudes, la dejamos caer sin lamentarnos por ello…
Protegido: Día 90 a 93 (12 al 15/2/10): Habana y salida hacia Varadero
Martes, febrero 16th, 2010Protegido: Día 87 a 89 (9 al 11/2/10): La Habana
Viernes, febrero 12th, 2010Día 86 (8/2/10): Rumbo a La Habana
Martes, febrero 9th, 2010Estamos haciendo ya rumbo directo a La Habana, a Marina Hemingway, ahora mismo la tenemos a 60 millas de la proa, rumbo 081º. Navegamos a motor, nada más cruzar el Cabo de San Antonio me sentí como en casa, es por todos los navegantes conocido que el viento predominante del mediterráneo es el “morral” (el que te viene de morros), pues se ve que por aquí también, 15 nudos de proa, menos mal que la ola que levanta no es excesivamente grande y los pantocazos son moderados, nada que ver con cuando llegamos a Santiago de Cuba, aquello si fue horrible.
Ya tenemos claro que no llegamos de día, así que hemos puesto el motor a 1.600 vueltas y avanzamos a 5 nudos, no tiene sentido llegar antes, vamos a tener que esperar de todos modos.
Protegido: Día 85 (7/2/10): A punto de llegar al Cabo de San Antonio
Lunes, febrero 8th, 2010Días 83 y 84 (5 y 6/2/10): Cayo Largo
Lunes, febrero 8th, 2010Vaya nochecita la de Cayo Guano, durante la noche fue subiendo el viento, llegó a 30 nudos, y empezamos a garrear. Sabía que el ancla no estaba clavada, cuando llegamos me tiré a comprobarla buceando, como siempre, el fondo era de posidonia con un fango muy duro, en ese tipo de superficies no agarra, por esto le soltamos bastante cadena, 45 metros estando a una profundidad de menos de 6 metros. Como primera medida le soltamos toda la cadena, 60 metros, a ver si así conseguíamos pararnos, pero no había manera. La cuestión es que estábamos protegidos de la ola por la isla, entraba un poco de través por sus extremos y detrás nuestro teníamos como 200 metros en los que se mantenía la profundidad, luego descendía gradualmente. No habría sido problemático de no tener un catamarán alemán fondeado justo a unos 50 metros de nuestra popa, una isla desierta, solo dos barcos, y tuvo que elegir justo ese lugar, manda… Después de tirar toda la cadena nos movíamos muy poco, parábamos cuando bajaba un poco el viento, pero volvíamos a garrear en cuanto subía. Decidimos hacer guardias para vigilar la distancia al catamarán, todas las horas en punto yo saldría a vigilar y Jose Carlos todas las medias horas. En ningún momento llegamos a acercarnos mucho, tal vez porque él también garreaba, la cuestión es que dormimos poco y a ratitos.
Por la mañana los dos barcos levamos anclas y nos marchamos, cada uno en una dirección. Nosotros nos dirigimos a Cayo Largo, a unas 30 millas rumbo casi oeste.